Mezcal y tradición: presente en cada celebración

Más que una bebida, es un vínculo entre generaciones, un puente entre lo terrenal y lo espiritual. Su presencia en cada celebración es prueba de su poder simbólico y de su arraigo en la cultura oaxaqueña.

En el centro de la fiesta: el mezcal como ofrenda

1. Bodas: unión de almas y raíces

Durante las bodas tradicionales, el mezcal se ofrece como símbolo de bendición y abundancia. Los novios brindan con mezcal para sellar su compromiso con fuego, tierra y destino. A veces, incluso se personaliza el lote para la ocasión, convirtiéndolo en un mezcal único y sagrado.

2. Fiestas patronales: comunidad y devoción

En los pueblos oaxaqueños, el mezcal acompaña las festividades religiosas. Se reparte entre vecinos, músicos y danzantes, como una forma de agradecer y compartir. Aquí, el mezcal se convierte en un acto de fe, identidad y cohesión social.

3. Rituales de paso: del nacimiento al último adiós

Ya sea para celebrar la llegada de un nuevo miembro de la familia o para despedir a un ser querido, el mezcal marca cada etapa de la vida. Un trago al cielo, uno a la tierra y uno al corazón: así se honra el ciclo completo.

4. Reuniones familiares: calor y conversación

En los encuentros familiares, no hay mejor forma de iniciar la charla que con un vasito de mezcal. Se sirve con sal de gusano, rodajas de naranja o simplemente solo, porque lo importante es la compañía.

Ritual líquido: lo que no puede faltar en una celebración oaxaqueña

Cada celebración con mezcal es una forma de conservar nuestra memoria colectiva. En Excelente Compañía, llevamos ese espíritu en cada botella, para que nunca falte lo más importante en tus momentos inolvidables: el sabor del origen.